
Dinero y sustentabilidad
Cuando buscamos ser más sustentables, eso muchas veces trae incomodidad en la propia economía. Dejamos de lado muchas veces que los proyectos sustentables no dejan de tener costos, la obligación de sostener estructuras y, en definitiva, generar rentabilidad.
Por Eloisa Ponce de León
Hay marcas que nos gustan tanto, que aunque sepamos que tienen un “detrás de escena” dudoso, las seguimos eligiendo y siempre encontramos la excusa para que no sea tan malo y poder seguir consumiéndola.
Lo paradójico es que no suele perdonarse a aquellas empresas que priorizan el cuidado ambiental cuando empiezan a crecer económicamente. Parece que el dinero y la sustentabilidad no deberían cruzarse y se siente como una traición que una empresa responsable con el ambiente genere ganancias. Por este motivo, es importante que repensemos esta concepción.
En la mayoría de los casos, quienes desean emprender (en Uruguay) incorporando la sustentabilidad en sus negocios, se enfrentan con costos altísimos, que no les permite competir contra otras marcas y mantenerse en el tiempo. Lamentablemente, las opciones son dos: flexibilizar el propósito o directamente cerrar.
Cuando desde Fashion Revolution Uruguay hablamos sobre lo negativo de la forma de producción y consumo de “fast fashion” (moda rápida), es común que las personas nos planteen que quisieran consumir moda de otra manera, pero les resulta inviable económicamente; lo respetamos y reconocemos que no tenemos muchos argumentos en contra cuando se trata de la economía de cada uno.
He tenido la posibilidad de charlar con muchos emprendedores, estudiantes, profesionales recién recibidos, que inician proyectos que podrían llegar a tener gran éxito, pero la mayoría no llegan a cumplir (siendo muy optimista) diez años.
La realidad es que no dejan de ser un negocio, pensado de otra manera, con un nuevo paradigma, pero que al final de cuentas sigue siendo un negocio que sin ingresos no puede sobrevivir; y deberíamos erradicar de nuestro pensamiento que su labor tiene que ser desinteresada y altruista.
Para poder crecer, generar empleos y hacer aportes significativos a la economía y a la sociedad, es necesario que estos emprendimientos/proyectos tengan oportunidades reales de competir y expandirse. A su vez, el acceso a oportunidades de apoyo económico implica cumplir con requisitos que a veces están lejanos para marcas que están empezando.
De a poco y en la medida que cada uno pueda, podemos ir haciendo registro de otras marcas y tenerlas como alternativa.
Por supuesto que no todo lo que es caro es sustentable, aunque la propia marca se autoperciba de este modo. Es allí donde, una vez más, debemos apelar a nuestro sentido común y mirada crítica. Pero después de tantas columnas reflexionando, ya estamos más entrenados.
Sé parte del cambio Apóyanos!